lunes, 14 de marzo de 2011

SEXTA SEMANA

Por: P. Juan Carlos Lagla Chuquitarco (Ecuador)
06 a 12 de marzo 2011
Queridos amigos y amigas, hemos terminado la sexta semana del curso de Espiritualidad Agustiniana. Una semana muy alegre, ya que Dios concede un día de sol, para salir a caminar y deleitar los hermosos conventos o Basílicas u otros lugares que tienen que ver con historia Romana. A veces toca un día de lluvia para mojarnos. Así es la gran Roma. Pero, ahí vamos contentos y animados, viviendo la experiencia maravillosa del curso.
Bueno... cualquier coincidencia con la realidad es pura y totalmente casualidad.
Esta semana hemos recibido una clase diaria de Cristología de San Agustín, bajo la responsabilidad del P. Luis Guzmán Pérez, OSA (Provincia de Michoacán – México). Se refirió a los Concilios Ecuménicos que fueron definiendo la doctrina acerca de verdades fundamentales de la fe cristiana (I De Nicea, 325; I De Constantinopla, 385; De Éfeso, 431; De Calcedonia, 451; II De Constantinopla, 553).  En la cuales, aunque no directamente, influye o es influido, el pensamiento de San Agustín en cuanto la doctrina dogmática sobre la Santísima Trinidad, el misterio de Cristo y la cuestión de la gracia.
¡Muchas gracias, Padre Luis, por lo compartido!
Por otra parte, esta semana tuvimos unas horas para aprovechar en lecturas espirituales, o lecturas según nuestro gusto o preferencia.
Por cierto, el día Miércoles de Ceniza, gracias a Dios y el tiempo que nos permite vivir, hemos comenzado el tiempo de cuaresma, por eso la mayoría de los participantes en el Curso, hemos asistido a la celebración de la Santa Misa presidida por el Santo Padre Benedicto XVI, en la Basílica Santa Sabina.
En la cual en su homilía el Santo Padre Benedicto nos motivó a seguir: “el itinerario cuaresmal, que nos invita a contemplar el Misterio de la Cruz, [que] es hacernos semejantes a él en su muerte para llevar a cabo una conversión profunda de nuestra vida. Dejarnos transformar por la acción del Espíritu Santo, como San Pablo en el camino de Damasco; orientar con decisión nuestra existencia según la voluntad de Dios; liberarnos de nuestro egoísmo, superando el instinto de dominio sobre los demás y abriéndonos a la caridad de Cristo. El tiempo cuaresmal es el momento favorable para reconocer nuestra debilidad, acoger, con amor de vida, la gracia renovadora del sacramento de Penitencia y caminar con decisión hacia Cristo”.


Y por supuesto, esta semana, también, nuestros hermanos del curso tuvieron la dicha de participar en el pequeño Campeonato de Futbolín, organizado los hermanos de casa, en cual, P. Jesús  Madrid y P. Agustín Arbaiza, llegaron a la final. Deseamos que ganen el campeonato. ¡Adelante hermanos, sí se puede!

El día jueves, muy temprano, algunos tuvimos la grata y linda experiencia de celebrar la santa Misa en la pequeña capilla de san Clemente, ubicada en el interior de la Basílica de San Pedro. Fue presidida por el P. Luís Guzmán Pérez. OSA. Pues, aquel  día, cumplía sus 7 años de Ordenación Sacerdotal.  Que el Señor de la vida siga bendiciendo su vida religiosa y sacerdotal, y que, con alegría y entusiasmo, siga adelante, donando su vida “para otros tengan vida”. ¡Felicidades hermano! ¡Adelante!
Por último, el día sábado, todos, en comunidad, fuimos a conocer y deleitar la Historia que gira en torno al gran Coliseo Romano y parte de lo que queda de la antigua capital del Imperio. Esta visita fue guiada por nuestro  hermano el P. Mauricio Saavedra, OSA. ¡Gracias, P. Mauricio, por compartir con nosotros lo aprendido en historia.





Queridos hermanos continuemos viviendo el tiempo de cuaresma, que Dios nos concede. “Sepultados con él en el bautismo, con él también habéis resucitado por la fe en la fuerza de Dios, que lo resucitó de entre los muertos” (cf. Col. 2,12).

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